Mimodrama frente a la iglesia

Raíces

La pantomima se originó en la Edad Media. Pantomimus, una forma griega de la danza solo muestra movimientos tanto trágicos como cómicos. Esta forma de arte era parte de la cultura romana hasta que la iglesia cristiana cuestionó la pantomima y prohibió su exhibición. El gobierno contrarrestó la visión de los cristianos, al exigir a los cristianos a asistir a las representaciones teatrales romanas de pantomima. Con el tiempo, la iglesia se impuso y la pantomima fue prohibida del escenario.

Renacimiento Italiano

Durante el Renacimiento italiano, la pantomima reapareció y fue llamada Commedia dell'arte. Las actuaciones se extendieron rápidamente por toda Europa, estableciéndose en París, Francia y con el tiempo en Inglaterra. Las estrellas que se encuentran en estas producciones incluyen a Pagliacio y Arlecchino. Esta forma de arte se comunica a través de las barreras del idioma, ya que los presentadores no tienen que hablar el idioma local.

Historia de la pantomima


Historia

La comunicación no verbal y la mímica son características naturales humanas que han acompañado al hombre desde su origen, permitiendo al hombre primitivo comunicarse con sus similares antes de que inventara los código de la comunicación verbal.

La mímica dramática surge en la época de florecimiento del Imperio Griego y el Imperio Romano con el desarrollo de las artes escénicas. En Grecia se acostumbraba un tipo de representación dramática en la que el elenco portaba máscaras para la ejecución de un papel, frecuentemente realizando la narración o interpretación de una obra que era acompañada por música. Este tipo de representaciones podían incluir o no diálogos hablados, ya que este tipo de entretenimiento no era necesariamente en silencio. Este tipo de entretenimiento se traspasó a los dominios romanos en donde se convirtió en el espectáculo popular por excelensia, enfocándose prinicipalmente a las narraciones y burlesques de hazañas militares y relatos épicos.


Durante los siglos de la Edad Media el juglar representaba sus actos (narraciones, leyendas del folklore tradicional y baladas épicas) tanto en pantomima como en narración y prosa. Estos artistas viajaban de pueblo en pueblo, representando en las plazas públicas, debiendo mediante el cuerpo prescindir muchas veces del idioma, dada la gran diversidad de lenguas y dialectos de las distintas zonas. En el siglo XIV se populariza el drama Nō en Japón, género teatral que comparte muchas características con la pantomima moderna. La mímica dramática alcanza su popularidad en la Italia del siglo XVI como una forma de la Commedia dell'Arte, en donde el elenco artístico portaba máscaras llamativas y coloridas para la representación de sketches humorísticos adornados con acrobacias.